Se acerca el invierno. Por suerte, llega con un buen prólogo.
El otoño en Escocia es un de las estaciones más secas y coloristas. Los rayos del sol crean atardeceres multicolores y los álamos cubren el suelo con un grueso manto de hojas. Huele a tierra y madera.
Los días son frescos y la atmósfera clara. Jersey y gabardina son todo lo que se necesita para disfrutar de un buen paseo.
Entre las hojas caídas hay montones de pequeños frutos que las ardillas recogen con diligencia.
Pero lo que esta roedora tiene entre manos no viene del suelo, sino de mi bolso. Estoy segura de que sin mí no iba a pasar hambre pero, ¿quién se puede resistir a llenar esa barriguita blanca? Como muchos que paseaban ese día por los Jardines Botánicos, yo no. Y menos aún cuando la valiente está dispuesta a coger un pistacho de la palma de tu mano.
La luz del sol se cuela entre las ramas de los árboles creando efectos multicolores que cambian con la brisa.
No todo van a ser ventajas: el otoño arranca poco a poco el manto de privacidad que las hojas daban al nido de esta urraca.
Pronto vendrán el hielo, la lluvia y el viento. Quizá incluso la nieve. También tendrán sus momentos de belleza pero, para cuando no los vea, quedarán estos recuerdos.
Jo, que fotos más bonitas, y que ardilla más maja. La luz del otoño es especial. Y la de la primera foto lo capta muy bien, en mi opinión. Que sigas disfrutándolo en lugar tan bonito.
ResponderEliminarUn saludo :)
Qué lugares tan hermosos. Lástima del maldito frío y la poca luz que hay, sino, Escocia sería el paraíso en la tierra.
ResponderEliminarEsas fotos muestran un amor por la naturaleza (y los árboles) que comparto.
Un saludo.
Bellísimo reportaje, la foto de las hojas rojas es impresionante. Un abrazo y... a abrigarseeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarUHMMM! Menuda combinación de fotos, expresión lírica y paisajes. Amén de sentimientos engarzados en naturaleza viva. Me encantó tu reportaje. Y me encanta tu anuncio del invierno. Al fin y al cabo todos los seres vivos hemos de prepararnos. Un saludo.
ResponderEliminarQue bonitas las fotos que has tomado de Escocia y que suerte tener la ocasión de tomarlas allí, reconozco que el otoño no es mi estación favorita, pero fotográficamente hablando, me encanta, por tal gama de tonalidades con que la naturaleza nos sorprende y obsequia. Que tengas un buen fin de semana,
ResponderEliminarGracias a todos, me encanta cómo habéis dejado esto. Es interesantísimo ver cómo cada uno se fija en una cosa distinta según la personalidad :-)
ResponderEliminarExplorador: si que era simpática. Hubo un momento que un perro vino a darle guerra, se subió a un árbol y mientras el can ladraba a todo pulmón ella se puso en posición de dormir. También vi a una pareja que vino con un paquete enorme de cacahuetes. Cuando las ardillas cogieron confianza, ponían una mano vacía delante de la que tenía la comida y las ardillas se subían a una mano para comer de la otra. Tendré que probar eso...
Igor: tu es que estás muy mal acostumbrado... Entre la humedad de Galicia y el frío seco de Escocia no sé con qué me quedo. Lo que me gusta de estos paseos por la Naturaleza es que no se puede saber qué vas a encontrar, lo único seguro es que relajan.
donfernando: me alegro que te guste la foto, la brisa de la que hablo me la puso algo difícil y yo aún la veo algo desenfocada. Menos mal que la saqué en el aparcamiento de casa y no había prisa.
tanci: gracias. El año pasado fue el invierno más frío de los últimos 30 años, el anterior el peor de los últimos 18, así que este año sí que le tengo cierto respetillo.
Nieves: en España a mí el otoño tampoco era la estación que más me entusiasmaba, pero hay una pequeña diferencia: aquí es relativamente seco, así que puedes disfrutar del paisaje un poco más. En verano hay más horas de luz pero, teniendo en cuenta el clima, cuesta lo mismo sacar una foto al aire libre en verano que en otoño.