11 marzo 2013

Karma infantil

Hoy tocó ludoteca. Para los benditamente ignorantes, una ludoteca es como un parque infantil pero de pago, a cubierto y forrado con gomaespuma y hule. La fauna es variada y siempre encuentras alguna criatura de sonrisa permanente y modales impecables que te hace volver a casa con fe en el futuro. Pero hoy no tocó sólo eso.

Entre las niñas educadas y los niños independientes estaba un Jaimito soplagaitas. Vaciando la piscina de bolas, subiendo por la rampa del tobogán con juguetes enormes cuando otros niños querían bajar o metiéndose a sus cinco años en la zona de bebés, Jaimito tocó más pelotas que Urdangarín. Los padres (si, los dos, aquí el padre es de los que "participa") hacían honor al "de tal palo tal astilla" dejando al bicho suelto y sin bozal mientras otros niños sufrían las consecuencias.

Como esto es Anglosajonia, la sangre de los demás progenitores hervía en educadísimo silencio. Pero el pecado no quedó sin castigo.

Uno de los juegos preferidos de mi hija en la ludoteca es el autobús del karaoke. Es un poco más grande que los típicos coches de monedas de los centros comerciales, pero dentro tiene una pantalla para cantar. A mi Jueves le pirran los niños del vídeo. Cuando fue hoy, ahí estaba Jaimito sentado. Pero apretando un poco cabían dos, así que la subí sin preguntar. Empezó la música y mi rechoncha -que tiene unos mofletes como globos y un corpachón a juego- se puso a bailar. Quiso el destino que su torpeza de bebé llevara sus talones una y otra vez sobre los dedos de los pies de Jaimito. La canción duró lo suficiente para que el pequeño bribón escapase del autobús por la única salida que mi criatura le dejó: la ventana.
Mientras, la abajo firmante hizo lo que tantas veces habrá hecho la madre del enano: no vio nada, no oyó nada y no dijo nada (pero al acabar la música estampó un sonoro beso en cada mejilla de su kármica criatura).

10 comentarios:

  1. ¡Así va el mundo! Con Jaimito saliendo por la ventana. Bueno, de esta tipología de niños, aunque minoritarios, los hay en todas partes. Hasta hay un tipo de padres que tienen la filosofía de "déjale hacer lo que quiera", que no es más que pura pereza.
    Un poco de justicia en lunes por la hija de Miércoles.
    Saludos.

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    1. En este caso era peor que "déjale hacer lo que quiera". Era el mayor de tres hermanos. La pequeña se llevaba las culpas de la mitad de los desaguisados (mitad elegida aleatoriamente), la mediana iba detrás arreglándolos en silencio. Adivina quién de los tres es la hermana cuyo nombre no oí ni una vez. Espero que tarde mucho en aprender la lógica conclusión de que ser buena no merece la pena.

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  2. Que escena más..británica, o lo que imagino por tal, al menos. Si puedes pasarte por España en breve, se podría intentar meter a un tal Bárcenas en un bus...

    Y sobre todo, me alegro de los besos, las experiencias y la felicidad. Un abrazo grande :)

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    1. Me temo que para ese Jueves no es lo suficientemente rechoncha :-)

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  3. ...por sus actos los conoceréis... o de tal palo, tal astilla. Jueves venció con su espontaneidad...¡bravo por ella! El Jaimito habrá aprendido que no tiene a todo el mundo a sus pies...aunque tuvo los de Jueves ;-) Saludos

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    1. Puede que el "de tal palo, tal astilla" tenga más relevancia aquí de lo que creíamos. Hoy volvimos y Jueves se montó en el mismo bus con otros dos niños. Éstos sí eran majos y no les tocó un pelo. ¿Destino, torpeza de bebé o algo de la vena maquiavélica de su madre? El tiempo dirá.

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  4. Quizá los padres tuvieran una perspectiva más completa y debieran haber hecho ver a su "Jaimito" las molestias que ocasionaba con sus hazañas. Pero ellos claudicaron en enseñarle que el parque es de todos. A veces, no sé si esa forma de entender el mundo en que lo mío es mío y lo de los demás a medias se hereda y no precisamente por el RH, sino por la falta de implicación/educación.

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    1. Creo que en este caso el problema era aun mas grave: la mediana era de lo mas respetuoso y, por eso mismo, completamente ignorada por los padres.
      Aunque los padres tuviesen buen fondo, si solo atienden a los estimulos negativos la cosa no puede acabar bien.

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  5. Jaja pues bien merecido lo tenía el enano ese! Por qué tienen que sufrir los otros niños que algunos padres sean unos pasotas con los suyos? Cuando me encuentro alguno de esos me da una rabia!

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    1. De esto hace seis meses y desde entonces no he visto a Jueves tropezar o pisar a otro crio ni sin querer. Cuanto más la conozco, mas sospecho que esos pisotones no fueron completamente por accidente.

      Mejor no te cuento lo que hago yo en esos casos. Digamos que de casta le viene a Jueves.

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